El último disco de los Granaínos Lori Meyers no ha estado exento de polémica, dudas y sobre todo rechazo por parte un gran número de sus seguidores más fieles. Como ya comenté anteriormente en este blog, "Cuando el destino nos alcance" es un disco de por sí arriesgado, ya que los Lori se han matido de lleno en ritmos más bailables que en su anterior cd "Cronolánea", (maravilloso, por cierto), y se han separado bastante de las líneas musicales por las que estábamos acostumbrados a clasificarlos.
Pero este verano he tenido la oportunidad de asistir a dos de sus directos, uno en el festival Low Cost de Benidorm, y otro en Almería, y las cosas como son, si no hubiera escuchado con anterioridad las críticas que les habían hecho, seguramente diría que aún con estos cambios de registro de los que ya he hablado, este cd se presta mucho más al baile, y a cantar y gritar los estribillos como si de himnos se tratase.
La gente lo pasó genial con ellos en ambos directos, derrochaban un buen rollismo que inundaba los fosos y las gradas. Además colocaron un par de temas míticos entre sus temas más nuevos, que hicieron las delicias de los más meláncólicos de "Cronolánea", como son "Luciérnagas y Mariposas", "La búsqueda del rol" o "Luces de Neón" entre otras.
Sin duda tienen mi aprobado, y ahora veo su nuevo cd desde otro punto de vista.
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